¿Cómo funciona la biomasa?

La biomasa no es una palabra que se escuche todos los días. Aún así, es una energía que se usa más de lo que parece, ya que es una forma sostenible de generar electricidad. Se presenta como una solución bastante prometedora dentro de todas las fuentes renovables de energía, tanto a nivel económico, como a nivel medioambiental. Pero, ¿Qué es la biomasa? ¿Cómo funciona realmente? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de utilizar biomasa como fuente de energía? Hoy, vamos a dar respuesta a todo esto. ¡SIGUE LEYENDO!

¿Qué es la biomasa?

Antes de explicar cómo funciona la biomasa, hay que saber exactamente qué es.

La biomasa es una energía que se obtiene a partir de la combustión de materia orgánica. ¿Y de dónde sale esta materia orgánica? ¿Qué se utiliza? Pues se reutilizan los residuos de los procesos biológicos diarios. Por poneros algún ejemplo: desechos de agricultura, cáscaras de frutos secos, restos de poda de árboles, restos de madera (como pellets), o incluso el excremento animal.

Es una forma de producir energía más economica y más sostenible, ya que su combustión produce muchísimas menos emisiones. Además, es una forma de mantener limpios los bosques, evitando incendios innecesarios. También, por la forma en la que se obtiene, se pueden conseguir ya todos los tipos diferentes de biomasa. Calefacción, electricidad, combustible… todo esto lo puedes conseguir con esta energía.

Tipos de biomasa

Efectivamente, al poder obtenerla de tantas formas, también hay tres diferentes tipos de biomasa que se pueden obtener:

• Biomasa sólida. Madera, residuos agrícolas, paja y otros materiales similares. Este tipo de biomasa se utiliza comúnmente en la generación de calor y electricidad a través de su combustión.
• Biomasa líquida. Biocombustibles líquidos como el bioetanol y el biodiésel, que se obtienen a partir de cultivos energéticos como el maíz, la caña de azúcar o el aceite de palma.
• Biogás. Se produce a través de la descomposición anaerobia de materia orgánica, como residuos de alimentos o estiércol. El biogás es una mezcla de metano y dióxido de carbono, que puede utilizarse como fuente de energía.

¿Cómo funciona la energía biomasa?

Hay varias formas de conseguirla, pero, si quieres saber cómo funciona la biomasa, os explicamos los más comunes a continuación.

La forma más tradicional y sencilla de utilizar la biomasa para generar energía es la combustión directa. Consiste en quemar el material orgánico para producir calor, que luego se puede utilizar para generar vapor y accionar una turbina para producir electricidad. Este proceso es similar al utilizado en las plantas de energía a base de carbón, pero con la ventaja de que la biomasa es una fuente de energía renovable, y no contamina tanto.

La gasificación es otro proceso en el que la biomasa se convierte en gas mediante la aplicación de calor en presencia de una cantidad controlada de oxígeno. Este gas de síntesis o syngas, se utiliza para generar electricidad o como materia prima para la producción de productos químicos y combustibles líquidos.

Otra forma es la pirolisis, un proceso térmico en el que la biomasa se descompone en ausencia de oxígeno para producir carbón vegetal, bioaceite y gases. Estos productos pueden ser utilizados como combustibles o para la producción de energía.

También está la fermentación, un proceso biológico en el que la biomasa se convierte en biocombustibles líquidos como el bioetanol. Se utiliza, sobre todo, con cultivos tipo maíz o caña de azúcar.

Ventajas de la energía biomasa

Ya sabes cómo funciona la biomasa en sus diferentes estados, pero, como toda energía, aunque sea renovable y limpia, tiene sus ventajas y desventajas. Empecemos por las ventajas de la biomasa:

1. Contribuye al mantenimiento de bosques y al reciclaje de residuos orgánicos.
2. Es una fuente de energía renovable y limpia. La biomasa se puede renovar a través de procesos naturales y agrícolas en un plazo de tiempo relativamente corto. Si quieres saber más sobre este tema, quizá te interese: diferencia entre fuentes de energía renovables y no renovables.
3. Aunque la combustión de biomasa libera dióxido de carbono, este CO2 fue originalmente capturado de la atmósfera por las plantas durante su crecimiento. Por lo tanto, el uso de biomasa se considera neutro en carbono, ya que no emite CO2 extra, siempre que se gestione de manera sostenible, claro.
4. Diversifica la matriz energética, ergo, se reduce la dependencia en combustibles fósiles.
5. Energía barata y rentable, y, además, favorece la economía circular.

Desventaja de la biomasa

Por supuesto, utilizar la biomasa como fuente de energía también tiene sus desventajas:

1. Necesita terrenos muy grandes para su producción y almacenamiento.
2. Rendimiento menor al de otras fuentes de energía.
3. El cultivo de biomasa puede competir con la producción de alimentos, llegando a encarecer el precio de dichos alimentos.
4. Puede emitir ciertos contaminantes con la incineración de la materia orgánica. Por ejemplo, óxidos de nitrógeno, monóxido de carbono y alguna que otra partícula y compuesto orgánico volátil.

Importancia de la biomasa y conclusión

Después de ver cómo funciona la biomasa y sus ventajas, está claro que esta energía puede jugar un papel muy importante en la sociedad actual, y futura. Su capacidad para aprovechar residuos y su naturaleza renovable la convierten en una de las mejores opciones para luchar contra problemas actuales, como el cambio climático. ¿Pero en que reside exactamente la importancia de la biomasa? Pues, además de las ventajas que hemos nombrado, tiene otros beneficios:

1. La biomasa es un componente importante de la economía circular, ya que permite la reutilización de residuos y la generación de productos de valor añadido, como biocombustibles y productos químicos.
2. El desarrollo de tecnologías avanzadas para el procesamiento de biomasa, como la gasificación y la fermentación, ofrece oportunidades para la innovación y el desarrollo de nuevas industrias.
3. Al ser una fuente de energía renovable y neutra en carbono, la biomasa tiene el potencial de reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero.

Resumiendo todo esto, la biomasa es una fuente de energía renovable con un potencial muy bueno para contribuir a un futuro mucho más sostenible. Si bien es cierto que aún no está todo resuelto, cuenta con bastantes ventajas, por lo que es una energía a tener en cuenta. Al comprender mejor cómo funciona la biomasa y sus implicaciones, podemos tomar decisiones más informadas sobre su papel en la matriz energética global.